viernes, 26 de febrero de 2016

Adelanto de las exploraciones espeleólogicas en el Polje de Líbar

Hace ya quince años que concluimos la última campaña de exploraciones en el extraordinario Polje de Libar , dichas campañas fueron recogidas en  la ponencia que tuve la ocasión de presentar en el 1º Congreso Andaluz de Espeleología en Ronda titulada "Adelanto de las exploraciones espeleológicas en el Polje de Libar (Montejaque ,Málaga)".  A pesar del tiempo transcurrido sigue de total actualidad ya que no ha habido ninguna campaña de exploración posterior que haya añadido nuevos descubrimientos a los que aquí se publican:
https://explorandalucia.files.wordpress.com/2016/02/adelanto-de-las-exploraciones-espeleologicas-en-el-polje-de-libar.pdf



lunes, 27 de abril de 2015

La Sima de Moises.


La boca de la Sima de Moisés es una  torca de medianas proporciones y  difícil localización situada en la zona alta de la Sierra de Libar,  entre los llanos de Libar y de Republicanos, dentro del término municipal de Villaluenga del Rosario y que pertenece al  Parque Natural de Grazalema . Sus coordenadas son : 30S 290653.85 m.E .  4060487.62 m. N. y 1.187 m.s.n.m.
El acceso más cómodo es dejar el coche en el flanco Oeste de los Llanos del Republicano y  subir por  un sendero que  nos conduce a un bonito cortijo caracterizado por tener un bonito bosque de álamos  situado en una dolina y que se conoce como “Casa de las Cañadillas”, en el Google Earth, este paraje viene designado como   “Los Navazos de Libar” y al cortijo se le llama "refugio de Libar 2". Desde este punto   tomaremos un nuevo sendero con dirección Oeste hacia  los llanos de Libar  de fuerte pendiente  y que sube hasta el puerto situándonos  en la zona más alta de la Sierra. En esta zona se encuentra la Sima. Deberemos recorrer  unos doscientos metros de sendero desde el puerto y ya en llano , y a unos cien metros a la derecha del mismo se encuentra la sima. La abundante vegetación que rodea la torca  hace difícil su localización. La ruta tiene un desarrollo total de unos dos kilómetros salvando un desnivel de 359 metros.
 
 
 

RESUMEN DE LAS EXPLORACIONES
La cavidad fue localizada en los años 90 por el Grupo de Exploraciones Subterráneas de Ubrique G.E.S.U.B. Que la explora en su totalidad hasta un pozo donde un caos de bloques impide la progresión a una cota superior a los cien metros, sin que llege a  realizarse ningún croquis ni topografía.



Pozo de entrada a la cavidad

Descendiendo el Pozo de 39 metros
En Abril del año 2006 y en base a información proporconada por  miembros del GESUB , un equipo mixto de espeleólogos de los grupos Karst, Giex y del propio GESUB  la localizan  y exploran, decidiendo realizar una pequeña campaña en la Sima para su reinstalación ya que se había explorado casi exclusivamente utilizando anclajes  naturales, así como para revisar todas las incógnitas que pudieran ampliar la cavidad. En un par de salidas se  reinstala la sima  con paraboles de 12 mm. y se revisan las incógnitas existentes antes de la punta de exploración  que no aportan nada nuevo a lo ya conocido. 

El veinte de mayo del 2006, un equipo formado por miembros de los grupos Karst, Ces, Gesub y Giex realizan un levantamiento topográfico e intentan superar, sin resultados el tapón de bloques final, dándose por concluidos los trabajos en la cavidad.





Cebecera de Pozo de 39 metros.
DESCRIPCIÓN DE LA CAVIDAD
La Cavidad se abre al exterior en el fondo de una torca y  a favor de una gran falla vertical que forma un bonito pozo de 25 metros dividido en dos por un gran puente de roca. En el fondo  la continuidad aparece  penetrando por una gatera que tras un destrepe nos deja en una sala de la que parten varias vías descendentes de la que sólo una es penetrable  a través de una diaclasa vertical que se desciende en oposición hasta un nuevo sector formado al igual que el anterior por una sala muy concrecionada y con el fondo colmatado por derrumbes.
Ascendiendo el pozo de 25 metros.
La continuidad en este punto la encontramos trepando unos metros por encima del suelo  y penetrando por una gatera que desemboca  a una sala de mayores dimensiones y   desde la que se abren  tres vías penetrables; dos pozos verticales y una galería ascendente que culmina en una gatera impenetrable. La cavidad continúa por el mayor de los pozos que se encuentra equipado en cabecera con dos paraboles de 12 mm. Estando fraccionado en varias tiradas de 16, 12, 4 y 7 metros, formando una bonita vertical de treinta y nueve metros. En esta zona la Sima se abre, adquiriendo un gran volumen de cavernamiento, así como abundante recubrimiento parietal en algunas zonas de gran belleza.
Detalle de algunas formaciones espectaculares.
La descripción general de la Sima en este punto es la de una única falla  de grandes dimensiones y profundidad , taponada parcialmente por bloques procedentes de derrumbe. Tras este pozo (el mayor de la sima) y tras un corto recorrido horizontal nos encontraremos con una nueva vertical de 10 m. que nos deja sobre un gran tapón de bloques. La continuidad en este punto la encontraremos penetrando por un estrecho paso en el extremo del caos de bloques y por el que superaremos el mismo, descendiendo un nuevo pozo de 25 metros que nos deja  en una nueva sala de grandes dimensiones y cuyo suelo esta ocupado  en su totalidad por un nuevo  caos de bloques. Desde la base de este pozo podremos descender unos veinte metros más en oposición por una  diaclasa rellena de  grandes  bloques sueltos, lo que crea una situación muy peligrosa y que nos hizo abandonar la exploración en este punto.

 

FICHA TECNICA.

POZO

CUERDA

ANCLAJES

(Parabol 12 mm.).

       25

30

Parabol/ parabol / -3m.parabol(fraccionamiento)

       39 

50 

Parabol/Parabol/-1m.parabol(fraccionamiento)/-16 m.parabol(fraccionamiento)/,-28m.parabol(fraccionamiento)/-33m.Parabol(fraccionamiento)

 

      10

 

15 

Parabol/parabol

     25

 

35 

Parabol/-6 parabol(paso estrecho)/-7parabol(fraccionamiento)
 
                                                                                           
 
 

 

viernes, 30 de enero de 2015

RESUMEN DE LAS CAMPAÑAS DE EXPLORACIONES DE LA A.A.E.S EN EL SUMIDERO DEL NAVAZO HONDO O CES-1.


Situación:
La  CES-1 o Sumidero del Navazo Hondo es una cavidad situada en la  Sierra del Caillo, en el Parque Natural de Grazalema y en un bonito polje conocido popularmente como “Llano de los Navazos o El Navazo Hondo”, situado a unos 1.500 metros al Norte de la Localidad Gaditana de Villaluenga del Rosario. Sus coordenadas son: 286689.70, m. E, 4065261.15. m. N, Uso 30 y  1.124 m.s.n.m. Se trata de un importante sumidero estacionalmente activo y que ha día de hoy es una de las cavidades más importantes de la Sierra de Grazalema. 
Foto aérea del Polje de los Navazos con la superposición de los trazados de la Sima del Navazo Hondo y el Navazo Chico.
 El acceso a la cavidad se realiza siguiendo  las rutas de senderismo señalizadas hacia  los Llanos de Los Navazos  y que parten tanto de  la localidad de  Villaluenga como de la zona de acampada conocida como “Cintillo y Aguas Nuevas” a tres kilómetros de esta y en dirección a Grazalema. La Cavidad se haya situada en la zona central del llano y en la linde de este con el lapiaz, siendo fácil de localizar por el pequeño arroyo que  viene a morir en la pequeña torca de hundimiento rodeada de vegetación  que da acceso a la cavidad. En el llano existen otros dos  sumideros que también generan cavidades de cierta importancia, como la Sima del Pilón, en el flanco Oeste del llano y el sumidero del Navazo Chico, en el flanco Este.
Accediendo al Llano de los Navazos. Foto: Ricardo Tamayo.


Historia de las exploraciones:
 La cavidad fue localizada en el año 1.989 por miembros del grupo espeleológico CES de la línea, que tras varias jornadas de desobstrucción consiguen abrir su pequeña boca de entrada, totalmente taponada por bloques, explorándola hasta un sifón terminal situado a una cota de unos 150 metros. Posteriormente se descubre una nueva entrada situada en el lapiaz y a treinta metros por encima del sumidero, que se convertiría  a partir de entonces el acceso más cómodo.
La cavidad gana pronto notoriedad a nivel Andaluz convirtiéndose en el objetivo de  diferentes grupos espeleológicos como el IXODES de la Ciudad de la Línea, que levanta un primer plano topográfico , el GESUB de la cercana localidad de Ubrique o el ALTA RUTA de Jerez que realizan diferentes actividades de exploración en la sima. No hay novedades destacables hasta el  año 1.994 en el que se  descubre una vía  lateral y fósil  que puentea el sifón terminal  y que el CES  bautiza como “Galería del Espeleoproyec”. En la topografía del IXODES  aparece  un croquis en planta del principio de este nuevo sector al que ellos llaman  “la galería de la nocilla”en alusión al abundante barro que la tapiza y que junto a una sucesión de pasos estrechos hacen penosa la progresión. Estas galerías añaden  desarrollo y profundidad a la cavidad pero permanecen  durante años parcialmente exploradas y topografiadas, probablemente por la existencia de sifones temporales intermedios que limitan el acceso a la punta de exploración a los meses de verano.


Topografía publicada por el Grupo Ixodes.

Durante el año 2006 a AAES realiza una serie de actividades en la zona de los Navazos entre las que se destaca  la exploración de la Sima del Pilón de -122 m. y que concluye en un sifón  terminal impenetrable. Entre estas actividades se organizan  un par de salidas a la Sima del Navazo Hondo con objeto de valorar sus  posibilidades de continuidad realizando una nueva topografía desde la boca de entrada hasta  los sifones temporales de la galería del Espeleoproyec, que en ese momento estaban inundados, además se realizan algunas  labores de desobstrucción para acomodar algunos pasos.
Sala María. Foto: Diego Mendoza.

La AAES no realiza más actividades en la sima hasta el verano del año  2.009 comenzando esta nueva campaña con la exploración del sifón terminal S-1,  que resulta ser un estrecho conducto del que se recorren unos veinte metros sin alcanzar ninguna zona aérea. El rumbo que toma parece indicar una probable conexión con la Galería del Espeleoproyec. El resto de la campaña se centra en continuar la exploración y topografía completa del Espeleoproyec. En un par de salidas  se logran superar los dos sifones temporales, S-2 y S-3, que estaban parcialmente inundados (el S-3 se supera buceando), reexplorando y topografiando la galería posterior que para nosotros era aún desconocida, conociéndola sólo de oídas.  A parte del  nuevo sifón terminal  S-5, del que ya nos habían hablado  se localiza una vía lateral que también concluye en un sifón, el S-4, que es claramente un aporte y que por su rumbo parece la salida lógica del S-1. Con esto parecen confirmarse las sospechas de que el S-1 no es más que una galería inundada o nivel activo  que discurre por debajo de la galería del Espeleoproyec y que finalmente conecta con  esta. A finales de verano se concluye  el levantamiento topográfico de  la galería del  Espeleoproyec donde también se reinstalan dos pozos que dan acceso a la sala donde se encuentra el último sifón S-5. La topografía arroja de momento un desarrollo de 1. 020 metros  y un desnivel de -168 m.
 
Menadro antes de la Sala María. Foto: Baltasar Felguera.

No se organiza una nueva campaña hasta el verano del año 2012, en la  que tras varias salidas preparatorias de reinstalación y porteo se consigue explorar el S-5. Este nuevo sifón es una galería de veinticinco metros de desarrollo y una profundidad máxima de 6 metros. Las condiciones del sifón no son buenas ya que el lecho de la galería esta ocupado por una gruesa  capa de barro que obliga a volver en visibilidad “0”, las dimensiones medias de este conducto son de un metro a dos  de anchura por unos cincuenta centímetros de altura en algunos puntos. Es una típica galería sifonante con  perfil en forma de  “V”. Tras el sifón se abre una nueva galería aérea de grandes dimensiones y de la que se recorren unos treinta metros destrepando  dos resaltes de unos cinco metros  y deteniéndose la exploración en un nuevo resalte que no se destrepa por seguridad, (la exploración se realiza en solitario por lo que se decide no arriesgar), en total la sima ya alcanza aproximadamente los -200 metros de profundidad. La nueva galería es bautizada como “Galería Maki”, en honor al compañero Francisco Javier López Maqueda alias “Maki”,  perteneciente al grupo Plutón y  fallecido en un accidente mientras practicaba barranquismo. 
1º inmersión en el S-5. Foto: Ricardo tamayo

Tras comprobar la continuidad de la sima tras el S-5 lo que queda de campaña lo invertimos en la búsqueda de una vía alternativa que pudiera puentear el sifón, realizando varias escaladas sin resultados, salvo una ventana situada en el techo de un meandro por la que se explora una galería de  unos cuarenta metros de desarrollo  que culmina en un pequeño sifón impenetrable.
Durante la  campaña del 2.012 tuvimos por desgracia que lamentar el  fallecimiento del compañero Manuel Alba Gil, vecino de Fuengirola y perteneciente al Espeleoclub Mainake que sufre un infarto en el interior de la Sima mientras colaboraba en la campaña. La buena coordinación de los grupos de rescate, tanto del Espeleosocorro andaluz  como de Bomberos y Guardia Civil permite extraer su cuerpo ya desgraciadamente sin vida al día siguiente del suceso.
 
Croquis de exploración de la Galería Maki. Dibujo: José Millán.

En  el verano del año 2.014 la AAES  realiza una nueva  campaña  que tiene como objetivo principal  culminar la exploración y topografía de la Galería Maki. En esta ocasión el sifón sería superado por dos espeleobuceadores lo que duplica el número de petates y por tanto la complejidad del porteo por el tortuoso espeleoproyec. También portearíamos algo de material de progresión vertical a la galería Maki  por si alcanzábamos un pozo, cosa algo engorrosa dada las condiciones del sifón. Habríamos también de valorar  las posibilidades de vaciado del S-5  si la sima continuaba en profundidad, cosa complicada ya que el sifón esta constantemente en carga, incluso en pleno verano. 
Superando el sifón S-3. Foto: Baltasar Felguera.
 Tras varias salidas de instalación y  porteo durante el mes de Agosto y algún aplazamiento de fechas  todo el material  queda dispuesto a pie de sifón a finales de Septiembre. Y tras un nuevo aplazamiento por el riesgo de lluvias en la zona la inmersión se realiza finalmente el día 29 de Septiembre, cuando las condiciones  meteorológicas eran más propicias. La inmersión comienza con la reinstalación del  hilo guía que se sustituye  por otro más grueso y con  el porteo del  equipo de verticales al otro lado del sifón. Una vez en la galería Maki se alcanza el último punto explorado situado en la cabecera de un resalte de unos seis metros de desnivel y que se  consigue descender  sin necesidad de cuerda, siendo la base del mismo un gran caos de bloques desde el que la continuidad es un laminador descendente y  muy  lavado que tiene unos tres metros de anchura por un metro escaso  de altura y por el que se recorren unos treinta metros hasta un paso impenetrable e inundado. El agua que circula por la sima desaparece por este pequeño sifón. Concluimos en este punto la exploración realizando a la vuelta un croquis topográfico de todo lo explorado. Las únicas continuidades posibles son dos ventanas situadas en los techos de la galería principal que tiene unos veinticinco metros de altura y a las que habría que acceder mediante escaladas.
Lago en la base del pozo de 18. Foto: Ricardo Tamayo.

  Durante la campaña también se exploran y topografian dos galerías situadas antes del S-5 y que resultan ser de corto desarrollo, así mismo se realiza una escalada (continuación de otra realizada en la campaña 2012) en la sala previa al S-5 que no da resultados. También se realiza un intento de vaciado del S-4, sifón que supones es la salida del S-1 aunque no conecta con él por lo que seguro habría  una galería seca intermedia.  Tras muchos esfuerzos se consigue  hacer descender el nivel de agua un metro y medio por gravedad, sin poder vaciarlo completamente y comprobando que el fondo del sifón es un estrecho laminador complicado de superar buceando. Tras estas actividades se retira todo el material de buceo e instalación de la sima y se da por concluida la campaña. La topografía arroja un desarrollo total de 1.148 metros y un desnivel de -198 m.
Zona final del Espeleoproyec antes del S-5. Foto: Baltasar Felguera.
 Descripción de la Sima:
          La cavidad tiene dos accesos: El sumidero que esta situado en el llano y donde tendremos que superar una sucesión de estrechos pasos entre bloques, y la Sima, situada a unos  treinta metros sobre el lapiaz y en la misma vertical del sumidero,  que consta de dos pozos consecutivos de 14 y 9 metros. Por ambas entradas llegaremos a las galerías iniciales donde tras salvar entre bloques unos pequeños resaltes alcanzamos una gatera parcialmente  inundada bautizada como “el vigilante”. En este  sector encontramos varias galerías excavadas por diferentes cursos de  agua y que acaban por converger en el colector principal.
Superado  el vigilante  accederemos  a un corto meandro que nos sitúa en una bonita vertical de veinte  metros fraccionada en dos tiradas de 5 y 15 metros. En la base  de este pozo y tras vadear un lago alcanzaremos una nueva vertical de 18 metros precedida por un resalte. En la base de este pozo comienza un bonito meandro adornado por espeleotemas y algún que otro charco de unos ciento veinte metros de desarrollo y prácticamente horizontal que culmina en una nueva vertical de 12 metros. 
Cabecera de pozo de 15 metros. Foto: Baltasar Felguera.
La base de este pozo es una sala de unos 14  metros de anchura en su radio más ancho conocida como Sala María y que debe corresponder a un primitivo nivel freático desfondado, atestiguado por la presencia en suelo y techos de estratos de margas impermeables, estamos a una profundidad de unos noventa metros. La continuidad de la sala la encontramos tras descender unas rampas por las que alcanzamos un caos de bloques  donde una gatera da paso a un nuevo meandro de mayores dimensiones  que se va desfondando en verticales sucesivas de 6, 5, 15 y  14 metros. Es en  la cabecera de la vertical de 15 metros donde  encontramos una ventana que da acceso a  la llamada Vía del Espeleproyec, una zona  fósil que discurre en principio paralela a la vía principal, uniéndose posteriormente con esta.   Alcanzada la base de estas verticales estaremos en una sala de medianas dimensiones situada a 140 metros de profundidad desde la que podemos encontrar dos continuidades: una galería parcialmente  inundada de unos 25 metros de desarrollo que culmina en el S-1, uno de los sifones terminales de la cavidad., y una corta y estrecha gatera que conecta con la galería del Espeleoproyec.  
Descendiendo un pozo previo al S-1. Foto: Rober Ferrer.
 La Galería del Espeleoproyec desde este punto  se desarrolla como una especie de  “laminador” de apenas 1 metro de altura media y cubierto completamente por barro, lo que hace algo penosa la progresión. Tras recorrer unos 60 metros nos encontramos con el primero de los sifones temporales, el S-2,  que en época estival no pasa de ser un largo y molesto  charco que hay que superar arrastrándose. Tras este paso la galería sigue con la misma tónica  y dejando atrás un meandro descendente que acaba por hacerse impenetrable alcanzaremos el S-3, un nuevo sifón temporal generado por un pequeño pozo inundado  por agua y barro  que sólo es superable sin bucear  a finales de verano. A partir del S-3 la morfología de la galería cambia aunque sigue siendo estrecha y embarrada, entramos en el sector final del Espeleoproyec que no es más que un conjunto de pequeñas galerías generadas por el agua e interconectadas por gateras,  con un desarrollo total de algo más de cien metros. En este punto  encontramos una primera vía descendente que da acceso a un estrecho  sifón, el S-4. Creemos que este sifón  esta conectado con  el S-1  ya  que  es el aporte principal  de este sector y así parece confirmarlo la topografía. Siguiendo la galería a favor del curso de agua  llegamos a un sector de mayores dimensiones y donde encontramos  las dos últimas verticales de la cavidad de 4 y 10 metros y que nos dejan en una sala de unos siete metros de altura previa al sifón terminal o S-5. El S-5 tiene una longitud de 25 metros y una profundidad máxima de seis metros, siendo su perfil en “V”. Tras este sifón se abre una galería de grandes dimensiones en principio pero que tras unos resaltes desemboca en un estrecho laminador que acaba por hacerse impenetrable a una profundidad de -198 m. 
Superando una gatera en el Espeleproyec. Foto: Baltasar Felguera.
 Grupos participantes y agradecimientos:

El listado de grupos que han colaborado en todas las exploraciones realizadas en la sima es el siguiente:
GIEX, GESUB, PASOS LARGOS. KARST, CES ESCARPE, FLASHBLACKCOURB, PLUTÓN, GEAG, GEAC, AMADABLAN SAN PEDRO ,  MAINAKE y GES DE PRIEGO.
Finalmente también agradecer la colaboración del  D. Antonio Morales, dueño del Bar Alameda en Villaluenga que nos ha cedido el caserío de su propiedad situado en la zona  como base de exploraciones y al Grupo Espeleológico de bomberos de Ubrique que han colaborado en la desinstalación y retirada de material de la sima.
 
Caserío utilizado como base de exploraciones. Foto: Pilar orche.









domingo, 16 de noviembre de 2014

Articulo sobre las campañas de exploración de la AAES en la Surgencia de la Minilla, años 2009 al 2012.


Localización y acceso:
La  cueva o surgencia  de la Minilla  se haya situada muy próxima al municipio de  Parauta (Málaga)  en un paraje conocido como “La pozuela”, en el cauce del Arroyo Bolones, sus coordenadas aproximadas son X: 309,129. Y: 4,058408. Z: 725 m.
El acceso a la cavidad lo haremos desde el mismo municipio de Parauta; poco antes de llegar a la población y tras pasar por delante del cementerio accederemos a una zona de aparcamientos previos a las primeras casas, en este punto  giraremos a la derecha  para  tomar la pista que circunvala la población. Siguiendo esta pista, sin desviarnos y  dejando  atrás algunos cruces que conducen al centro del pueblo  llegará  un  momento  que la pista deja de estar asfaltada convirtiéndose en un camino forestal, recorrido casi un kilómetro pasaremos  por delante de un pilar o fuente  pintada de blanco, conocida como “Fuente Nueva” que queda a nuestra izquierda , unos cien metros después de la fuente sale  un carril a la derecha que baja hacia el río entre castaños y que tras unos seiscientos metros se encuentra  cerrado  por una cadena.
Dejamos aquí el vehículo y seguimos a pié, descendiendo por la pista unos doscientos metros más  hasta el punto donde esta cruza el arroyo bolones. Remontando unos cincuenta metros por  el cauce encontramos la boca de la cavidad en el margen derecho del arroyo y cubierta por  zarzas situada  en un visible contacto  de margocalizas.
Boca de la cavidad en carga. (foto: José Millán)

Arroyo Bolones, en las proximidades de la cavidad. (Foto: José Millán)
 
El entorno físico:
La cavidad está situada en la vertiente Sur de la Sierra del Oreganal en un sector conocido como “Alto Genal”,  dentro del espacio natural de la “Sierra de las Nieves y su entorno”. Esta zona esta fundamentalmente ocupada por  masas forestales de castaños que crecen sobre suelos ácidos (tierras formadas fundamentalmente por gneises y peridotitas), es un terreno modelado por fuertes pendientes e  innumerables arroyos. La cueva se desarrolla en un contacto visible de calizas y mármoles que destacan sobre los suelos de peridotitas y que delatan su trazado a vista aérea (ver mapa).

Foto aérea de la zona sobre la que se superpone el trazado de la cavidad.
 
Descripción de la cavidad:
La Minilla es una surgencia  estacional y  sólo se activa en invierno por efecto de las lluvias que convierten la cavidad en potente Trop-plein, ocupando el agua todas sus galerías. Cuando llega el verano los niveles de agua bajan considerablemente quedando parte de su trazado aéreo. Siguiendo el curso del arroyo y a unos cien metros en sentido descendente encontramos un bonito nacimiento formado por una gran poza de la que mana  agua todo el año, a  trabes de pequeñas fisuras. Esta es seguramente la descarga inferior  del sistema y responsable del descenso de los niveles de los sifones en verano. En el pueblo es  esta poza  la que se conoce como “La minilla” y que da nombre a la cavidad.

Surgencia de la Cueva de la Minilla.(Foto: Ricardo Tamayo)
La entrada a la surgencia es una  rampa descendente  de casi tres metros de anchura pero de apenas 70 cm. de altura  ocupada por bloques sueltos de mediano tamaño. En la base de la rampa se abre una galería de mayores dimensiones   que   tras   un  paso  algo incómodo por estar ocupado por un charco accede a un nuevo tramo de galería más amplio y por el que podemos progresar completamente erguidos. A partir de aquí la galería va descendiendo progresivamente en espiral encontrándonos algunos pasos estrechos que obligan a tumbarse. Si la cavidad esta seca podremos recorrer unos cien metros hasta un destrepe que culmina en un sifón, el S-1, si no, encontraremos la cueva inundada mucho antes. La longitud de  este primer sifón puede  oscilar entre  los 80 y 15 metros y su profundidad entre los -20 y -4 metros, dependiendo de la época del año y  de  la  pluviometría  de este.


Rampa de acceso a la cavidad (Foto: Alex Puya)
 La parte más profunda del sifón es una gatera-laminador de 1 metro de ancho por unos 70 cm. de altura que obliga a usar configuración lateral. Cuando el sifón tiene poco agua se enturbia muchísimo  siendo   la visibilidad prácticamente nula a la vuelta, sobre todo si se atraviesa el sifón varias veces o por varias personas. Tras este primer sifón accedemos a una galería ascendente de  mayores dimensiones y  que culmina tras unos metros  en un resalte que hay que escalar. En este punto hay una cuerda fija. Una vez superado el resalte progresaremos por una galería de secciones muy cambiantes, a veces iremos erguidos y a veces agachados, y que va descendiendo y ascendiendo suavemente con lo que mantiene una cota  más o menos constante y donde encontraremos varios aportes superiores impenetrables. Así recorreremos unos doscientos metros hasta un nuevo sifón que en épocas de sequía puede llegar a convertirse en un lago. Este sifón es de escaso desarrollo, aunque fluctúa como el primero  no suele ser  superior a 10 metros. Tras el sifón  la galería sube y sigue en la misma tónica hasta que a los ochenta metros más o menos se desfonda en un pozo vertical  que encontraremos inundado formando  el S-3. La altura   de  este  pozo  depende  del estado de carga de la cueva pudiendo variar desde sólo unos cinco metros a más de diez. El sifón S-3 es la continuación de este  pozo, que tiene una profundidad total  de 23 metros desde la cabecera del mismo (unos -13metros de profundidad de agua en época de  niveles bajos). Tras el pozo se abre una nueva galería similar a la aérea precedente que va subiendo y bajando entre los -14 metros y -9 metros hasta que a los 120 metros de desarrollo sube hacia una nueva galería aérea que esta formada por una sala de unos cuatro metros de ancho y más de quince de alto que es la base de un pozo al que no se ha podido escalar sin equipo.
Detalle de la galería de acceso al S-1. (Foto: Manu Guerrero)
 Bajo el pozo y en sentido contrario al que venimos se abre una galería en rampa descendente  que culmina en un pequeño sifón, el S-4. Este sifón es un estrecho laminador descendente que parece abrirse en profundidad y donde hasta ahora se haya detenida la exploración. El desarrollo total de la cavidad es de unos 600 metros y lleva una dirección clara al Noroeste, es decir  hacia Parauta, por lo que pensamos   que  la  cavidad  podría estar asociada a las zonas de captación que existen en  Sierra Bermeja. En la actualidad se están realizando prospecciones en esta zona que están dando resultados interesantes y alentadores.
Otro trabajo de prospección  importante y que puede ser vital para las futuras exploraciones es el hallazgo de una entrada superior  que por topografía  estaría situada en los arroyos que bajan por las laderas superiores del cauce del Bolones .En esta zona hay algunos contactos de caliza donde se pierde el arroyo y que es justamente donde se encuentra la punta de la cavidad.

Sifón S-1. (Foto Manu Guerrero)
Historia de las exploraciones:

En el verano de 1995 miembros del grupo GER de Ronda,  localizan la cavidad, que ya era conocida por los lugareños y exploran los primeros metros, hasta el sifón S-1. Poco después vuelven con equipo de buceo y consiguen franquearlo, explorando un nuevo tramo de galería  hasta el pequeño sifón S-2 que en ese momento y debido a la sequía era sólo un lago, así alcanzan el último pozo y el sifón S-3 donde se detiene la exploración. El GER realiza una topografía completa de la cavidad  hasta este punto que arroja un desarrollo cercano a los 500 metros.
En años posteriores la cavidad recibe visitas de algunos grupos entre ellos el Espeleoclub Pasos Largos que la explora hasta el sifón terminal. La cavidad es incluida en el libro publicado en el año 2004  “Sierra de las Nieves, simas Cuevas y Barrancos” de Manuel José  Guerrero Sánchez.
Topografía del Grupo Espeleológico Rondeño. (sacada del libro "Sierra de las Nieves, Simas, Cuevas y Barrancos"
 
En el año 2009 la AAES  decide realizar una revisión de la cavidad y continuar su exploración. Una primera incursión en el sifón terminal con un pequeño biberón permite ver una clara continuidad en una galería de buenas dimensiones que se abre en la base del  pozo y a unos 16 metros de fondo (en ese momento el nivel de agua estaba algo más alto que de costumbre). En el mes de Noviembre un grupo de cuatro espelobuceadores realizan todo el porteo entre sifones para que uno de ellos  pueda continuar la exploración y así se consiguen recorrer ochenta nuevos metros de galería a una profundidad que oscila entre los -14 y -9 metros. La galería continúa en el punto alcanzado con buenas dimensiones. Durante los porteos realizados en esta punta  se aprecian síntomas de falta de oxigeno en la galería post-sifón: pulso demasiado  acelerado y cansancio excesivo, que hacen sospechar que o bien hay gases nocivos o la atmósfera está enrarecida.
Imagen de la campaña 2009. (Foto: Ricardo tamayo)




 
 Durante los años 2010 y 2011 la AAES visita la cavidad para realizar mediciones de la concentración de oxigeno y efectivamente esta oscila del 16% al 15% lo que hacen peligrosos los porteos. A pesar de todo se consiguen reinstalar todos los pasos expuestos con cuerdas y reequipar convenientemente el acceso al sifón terminal, que es la parte más crítica y complicada por no tener orillas y  que hasta ese momento se realizaba con un puente de roca que provocaba múltiples y peligrosos roces de la cuerda. Con la cavidad totalmente  reinstalada se plantea como abordar de  nuevo  la  exploración  con seguridad  y  se  barajan algunas alternativas como el vaciado del S-1 o la introducción de tubos de ventilación, alternativas complejas  que quedan descartadas cuando en una incursión a principios de verano del 2012 se comprueba que la concentración de oxigeno ha subido misteriosamente hasta el 18%. En estas condiciones mucho mas favorables se organiza una nueva punta y esta vez serán dos espeleobuceadores y se  portearan botellas más grandes (12 litros), colocadas en configuración lateral. Invertimos unas cuantas salidas y bastante esfuerzo  en tener todo el equipo en la cabecera del sifón terminal (casi todos los porteos entre los sifones  fueron realizados sólo por dos personas). Las botellas de 12 litros son muy pesadas de transportar pero permitirían hacer una punta más larga si el sifón se prolongaba (hasta el momento sólo se habían utilizado botellas de acero de  6 litros a 300 bares).

Porteo de botellas entre sifones en la campaña 2009 (Foto: Josemaría Cuesta)
Finalmente la punta se realiza a mitad del mes de septiembre por un equipo de tres espeleobuceadores, dos buzos punta y uno de apoyo. El acceso al sifón es complicado ya que hay que descender con el equipo(sin botellas) ya colocado (incluido equipo alpino)  hasta el agua que no tiene orillas y las botellas han de ser descendidas con el agravante de que hay que hacerlo en dos veces por la morfología del pozo que no es totalmente vertical. Tuvimos que instalar una  tirolina  para tal fin. Todo este proceso conlleva esfuerzo y bastante tiempo, sobre todo el sacar las botellas del sifón. En esta nueva inmersión se tuvo que  reinstalar todo el hilo guía ya que el antiguo se encontraba roto por muchos puntos debido a la fuerza de las crecidas. Se avanzó sin problemas  y en poco tiempo se superó el punto alcanzado en el 2009 continuando  hasta  los 120 metros de desarrollo donde la galería sube hasta un nuevo sector aéreo. La nueva galería es  de tónica vertical, de unos tres metros de ancho por unos seis de alto y cien metros de longitud  y que culmina en un pozo imposible de ascender sin cuerdas y en un pequeño sifón muy estrecho que no se llega a explorar. Se regresa de la punta topografiando todo lo explorado.

Campaña 2012. (Foto: Ricardo Tamayo)
 
 

Conclusiones:  

            La cueva de la Minilla es una cavidad con un gran potencial y que con toda seguridad continúa, bien por el pozo vertical, bien por el pequeño sifón terminal. Las condiciones de exploración son bastante extremas por la falta de oxigeno y la dureza de los porteos entre sifones. Como ya  hemos dicho un factor clave para la continuidad de las exploraciones es encontrar un acceso por la zona superior que pueda situarnos en la punta o cerca de ella. La posibilidad existe así que en eso se centrarán fundamentalmente las actividades futuras. Por otro lado estamos ante una cavidad muy activa y que debe de tener una importante zona de recarga y que por la dirección que hasta ahora lleva podría estar situada  en la zona alta de la Sierra Bermeja o alrededores donde de hecho existen importantes sumideros que se están revisando. Como pasa en otras muchas cavidades y como es el afán del explorador  nos ilusiona la idea de un gran sistema subterráneo que comience en algún sumidero lejano y culmine en La Minilla, por su situación su potencial es importante, unos 600 metros de desnivel y más de 4 kilómetros de desarrollo. Así que hay trabajo tanto para nosotros como para futuras generaciones de espeleólogos.


 

 
Grupos y  participantes:

            En las actividades de exploración han participado miembros de diferentes grupos andaluces, sin cuyo apoyo hubiese sido imposible esta exploración:

Grupo  Pasos Largos: Manu Guerrero y  José Luis Rubio. Grupo  Karst: José María Cuesta, Nacho Malibran, José Pastor, Jam Christoph  y José Millán. Grupo  GESUB: Ricardo Tamayo y Sandra Benítez. Grupo Mainake: José Antonio Cortés y  Lázaro Moreno Alarcón. Grupo Amadablan: Tomás Periañez. Grupo GEAC: Baltasar Felguera. Grupo GEAG: Antonio Moreno.

Dejo enlaces a dos videos grabados durante las actividades de exploración en la cavidad: